Aceite esencial sinérgico compuesto por una mezcla de esencias naturales seleccionadas por sus propiedades energizantes y purificantes. Ideal para productos que buscan estimular y revitalizar.
El aceite de aguacate se extrae de la pulpa del fruto del Persea americana, conocido comúnmente como aguacate. Es un aceite vegetal denso, de color verde dorado y aroma suave, que destaca por su alto contenido en ácidos grasos esenciales, vitaminas A, D y E, y antioxidantes naturales. Es ampliamente utilizado en cosmética, cuidado de la piel, nutrición y productos capilares por sus propiedades profundamente hidratantes, regeneradoras y nutritivas.
El aceite de almendras dulces se obtiene por presión en frío de las semillas maduras del Prunus amygdalus dulcis. Es un aceite vegetal de textura ligera, color dorado claro y aroma suave y agradable. Es ampliamente utilizado en cosmética, cuidado corporal y capilar por sus propiedades emolientes, nutritivas y calmantes. Rico en ácidos grasos esenciales, vitaminas A, B y E, y minerales, el aceite de almendras dulces ayuda a mantener la piel hidratada, suave y elástica.
El aceite de aloe vera se obtiene al macerar el gel natural de la planta Aloe barbadensis miller en un aceite portador vegetal, como el de coco, jojoba o almendras. Es un aceite ligero, de textura suave y aroma herbal delicado, que combina las propiedades hidratantes, regeneradoras y calmantes del aloe con los beneficios nutritivos del aceite base. Es ampliamente utilizado en cosmética y cuidado de la piel por su efecto refrescante, suavizante y reparador.
El aceite de argán se obtiene por prensado en frío de las semillas del fruto del árbol Argania spinosa, originario de Marruecos. Es un aceite vegetal dorado, de textura ligera y aroma suave a nuez, muy valorado en cosmética natural por su alto contenido en ácidos grasos esenciales, vitamina E, antioxidantes y fitoesteroles. Conocido como el oro líquido de Marruecos, el aceite de argán destaca por su capacidad para nutrir, proteger y revitalizar tanto la piel como el cabello.
El aceite de avena se obtiene por presión en frío del grano de Avena sativa, conservando sus nutrientes naturales y su característico aroma suave y cerealado. Es un aceite vegetal ligero, de textura sedosa y rápida absorción, muy valorado en cosmética por sus propiedades calmantes, hidratantes y protectoras. Rico en ácidos grasos esenciales, antioxidantes, vitamina E y ceramidas naturales, es ideal para pieles secas, sensibles o irritadas.
El aceite de caléndula se obtiene al macerar los pétalos de la flor Calendula officinalis en un aceite portador, como oliva o almendras dulces. Es un aceite de color dorado-anaranjado, con aroma suave y floral, muy valorado en cosmética natural por sus propiedades calmantes, regeneradoras y antiinflamatorias. Es ideal para pieles sensibles, irritadas o con tendencia a inflamación, y se utiliza ampliamente en cuidado infantil y de pieles delicadas.
El aceite de coco se obtiene por presión en frío de la pulpa fresca del fruto del Cocos nucifera. Es un aceite vegetal de textura cremosa a temperatura ambiente, con un característico aroma dulce y tropical. Muy valorado en cosmética, cuidado personal y nutrición, el aceite de coco destaca por su alta concentración de ácidos grasos saturados de cadena media (como el ácido láurico), antioxidantes y vitamina E, que le confieren potentes propiedades hidratantes, protectoras y regeneradoras.
El aceite de germen de trigo se extrae del núcleo del grano del Triticum vulgare o trigo. Es un aceite vegetal denso, de color ámbar dorado y aroma característico, muy rico en nutrientes esenciales. Contiene una alta concentración de vitamina E, ácidos grasos esenciales, proteínas y minerales, lo que lo convierte en un potente regenerador y antioxidante natural. Es ampliamente utilizado en cosmética y cuidado de la piel por sus propiedades nutritivas, reparadoras y protectoras.
El aceite de girasol se obtiene por prensado en frío de las semillas de Helianthus annuus, la flor del girasol. Es un aceite vegetal ligero, de color amarillo dorado y aroma suave, muy utilizado tanto en alimentación como en cosmética natural. Rico en ácidos grasos esenciales (especialmente ácido linoleico u omega-6), vitamina E y antioxidantes, el aceite de girasol es apreciado por sus propiedades hidratantes, emolientes y protectoras para la piel y el cabello.
El aceite de jojoba se obtiene de las semillas de Simmondsia chinensis mediante prensado en frío. Es un líquido dorado claro, ligero y de rápida absorción, químicamente similar al sebo humano, lo que lo hace extremadamente compatible con la piel y el cabello. Rico en vitaminas E y B, antioxidantes y ácidos grasos esenciales, el aceite de jojoba es ampliamente utilizado en cosmética y cuidado personal por sus propiedades hidratantes, equilibrantes y regeneradoras.
El aceite de karité se obtiene a partir de la manteca extraída de las nueces del árbol Vitellaria paradoxa, conocido como karité o árbol de manteca. Es un aceite vegetal espeso, de color amarillo pálido a dorado y aroma suave, rico en ácidos grasos esenciales, vitaminas A, E y F, y antioxidantes naturales. Es ampliamente utilizado en cosmética y cuidado de la piel por sus propiedades nutritivas, reparadoras y protectoras, especialmente en pieles secas o dañadas.
El aceite esencial de lavanda se obtiene por destilación al vapor de las flores de la planta Lavandula angustifolia. Es un aceite de aroma floral, fresco y relajante, ampliamente reconocido por sus propiedades calmantes, equilibrantes y regeneradoras. Utilizado desde la antigüedad en aromaterapia, cosmética y medicina natural, el aceite de lavanda es uno de los más versátiles y seguros, ideal tanto para el cuidado de la piel como para el bienestar emocional.
El aceite de linaza se obtiene por prensado en frío de las semillas de Linum usitatissimum, también conocidas como semillas de lino. Es un aceite vegetal de color dorado y aroma suave, rico en ácidos grasos esenciales, especialmente omega-3, omega-6 y omega-9, así como en vitamina E y antioxidantes naturales. Muy valorado tanto en nutrición como en cosmética natural, el aceite de linaza destaca por sus propiedades hidratantes, regeneradoras y protectoras para la piel y el cabello.
El aceite de macadamia se obtiene por presión en frío de las nueces del árbol Macadamia integrifolia. Es un aceite vegetal de textura ligera, color dorado claro y aroma suave y delicado. Destaca por su alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados, especialmente ácido palmitoleico, así como en vitamina E y antioxidantes. Es muy valorado en cosmética natural por su capacidad de hidratar, nutrir y proteger la piel y el cabello sin dejar una sensación grasa.
El aceite de manzanilla se obtiene por destilación al vapor de las flores de Matricaria chamomilla (manzanilla alemana) o Chamaemelum nobile (manzanilla romana). Es un aceite esencial de aroma dulce, herbal y ligeramente floral, reconocido por sus propiedades calmantes, antiinflamatorias y relajantes. Muy utilizado en cosmética y aromaterapia, este aceite combina beneficios para la piel, el cabello y el bienestar emocional gracias a sus compuestos activos como el bisabolol, chamazuleno y flavonoides.
El aceite de oliva se obtiene por presión en frío de los frutos del Olea europaea, el olivo. Es un aceite vegetal de color dorado verdoso, textura densa y aroma suave y afrutado, muy apreciado tanto en la alimentación como en la cosmética. Rico en ácidos grasos esenciales, vitamina E, polifenoles y antioxidantes naturales, es un ingrediente altamente nutritivo y protector, utilizado desde la antigüedad para el cuidado de la piel, el cabello y el bienestar general.
El aceite de ricino se obtiene por prensado en frío de las semillas de la planta Ricinus communis. Es un aceite vegetal espeso, de color amarillo pálido y aroma característico, conocido por su alto contenido en ácido ricinoleico, un ácido graso con potentes propiedades hidratantes, regeneradoras y fortalecedoras. Desde la antigüedad, ha sido utilizado en cosmética y medicina natural para el cuidado de la piel, el cabello, las pestañas y las uñas.
El aceite de rosa mosqueta se obtiene por prensado en frío de las semillas del fruto de la Rosa rubiginosa o Rosa canina, originaria de los Andes. Es un aceite vegetal de color ámbar o anaranjado, con un aroma suave y terroso, muy valorado en cosmética natural por su alto contenido en ácidos grasos esenciales, vitamina A (retinoides naturales), vitamina C y antioxidantes. Es conocido como uno de los aceites más eficaces para regenerar y reparar la piel.
El aceite de té verde se obtiene a partir de las hojas de la planta Camellia sinensis, las mismas utilizadas para preparar el té verde, mediante prensado en frío o maceración en un aceite portador. Es un aceite ligero, de color dorado verdoso y aroma herbal suave, muy apreciado en cosmética natural por su alto contenido de antioxidantes, polifenoles, catequinas y vitaminas E y C, que lo convierten en un potente protector y rejuvenecedor cutáneo.
El aceite de uva se obtiene por presión en frío de las semillas de la Vitis vinifera, la planta de la vid. Es un aceite vegetal ligero, de color verde claro y aroma suave, muy valorado en cosmética por su rápida absorción y textura no grasa. Rico en ácidos grasos esenciales, vitamina E, polifenoles y antioxidantes, el aceite de uva es ideal para nutrir, regenerar y proteger la piel, siendo un ingrediente frecuente en tratamientos faciales y capilares.
El aceite de zanahoria se obtiene al macerar la raíz de Daucus carota en un aceite portador, como almendra, oliva o jojoba, o mediante extracción de sus compuestos activos. Es un aceite de color anaranjado intenso, con aroma suave y terroso, rico en betacarotenos, antioxidantes y vitaminas A, C y E. Muy valorado en cosmética natural, el aceite de zanahoria ayuda a nutrir, regenerar y proteger la piel, además de aportar un efecto rejuvenecedor y revitalizante.
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