El extracto de caléndula se obtiene de las flores de la planta Calendula officinalis, una especie muy apreciada en la fitoterapia y la cosmética natural por sus propiedades calmantes, regeneradoras y antiinflamatorias. Este extracto contiene flavonoides, triterpenos, carotenoides y aceites esenciales que ayudan a mantener la piel sana y equilibrada. Su suavidad y eficacia lo hacen ideal para el cuidado de pieles sensibles, irritadas o delicadas.
ACEITE DE CALENDULA ATK
El aceite de caléndula se obtiene al macerar los pétalos de la flor Calendula officinalis en un aceite portador, como oliva o almendras dulces. Es un aceite de color dorado-anaranjado, con aroma suave y floral, muy valorado en cosmética natural por sus propiedades calmantes, regeneradoras y antiinflamatorias. Es ideal para pieles sensibles, irritadas o con tendencia a inflamación, y se utiliza ampliamente en cuidado infantil y de pieles delicadas.
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El aceite de manzanilla se obtiene por destilación al vapor de las flores de Matricaria chamomilla (manzanilla alemana) o Chamaemelum nobile (manzanilla romana). Es un aceite esencial de aroma dulce, herbal y ligeramente floral, reconocido por sus propiedades calmantes, antiinflamatorias y relajantes. Muy utilizado en cosmética y aromaterapia, este aceite combina beneficios para la piel, el cabello y el bienestar emocional gracias a sus compuestos activos como el bisabolol, chamazuleno y flavonoides.
El aceite de aloe vera se obtiene al macerar el gel natural de la planta Aloe barbadensis miller en un aceite portador vegetal, como el de coco, jojoba o almendras. Es un aceite ligero, de textura suave y aroma herbal delicado, que combina las propiedades hidratantes, regeneradoras y calmantes del aloe con los beneficios nutritivos del aceite base. Es ampliamente utilizado en cosmética y cuidado de la piel por su efecto refrescante, suavizante y reparador.
El extracto de valeriana se obtiene de las raíces de la planta Valeriana officinalis, conocida tradicionalmente por sus propiedades relajantes y calmantes. En cosmética, este extracto se utiliza por su capacidad para aliviar la irritación, reducir la tensión cutánea y favorecer la regeneración de la piel. Contiene compuestos activos como valepotriatos y aceites esenciales que aportan efectos sedantes y equilibrantes, ideales para el cuidado de pieles sensibles, estresadas o reactivas.
El extracto de salvia se obtiene de las hojas de la planta Salvia officinalis, una hierba aromática con un alto contenido de compuestos activos como flavonoides, taninos, aceites esenciales y ácidos fenólicos. En cosmética, este extracto se valora por sus propiedades purificantes, antioxidantes y equilibrantes, que ayudan a mantener la piel y el cabello saludables. Su aroma suave y sus efectos reguladores lo hacen ideal para productos destinados al cuidado de pieles grasas, mixtas o con tendencia acneica.
El agua de lavanda se obtiene por destilación al vapor de las flores de Lavandula angustifolia o lavanda común. Posee un aroma floral, fresco y relajante, y se utiliza en cosmética, aromaterapia y cuidado de la piel por sus propiedades calmantes, tonificantes y purificantes. Conserva los compuestos activos de la lavanda, como aceites esenciales, flavonoides y antioxidantes, que aportan beneficios tanto para la piel como para el bienestar emocional.