Extractos naturales

El extracto de uva se obtiene de la pulpa y la piel del fruto de la Vitis vinifera, y es una fuente natural de antioxidantes como polifenoles, flavonoides y resveratrol, además de vitaminas C y E. En cosmética, este extracto se valora por su capacidad para proteger la piel del envejecimiento prematuro, mejorar su firmeza y estimular la regeneración celular. Su composición rica en compuestos bioactivos lo convierte en un ingrediente esencial en productos destinados al cuidado antiedad y la revitalización cutánea.

El extracto de cebolla se obtiene del bulbo de Allium cepa, una planta rica en compuestos sulfurados, flavonoides (como la quercetina) y vitaminas del grupo C y B. En cosmética, este extracto se valora por sus propiedades purificantes, regeneradoras y estimulantes, que ayudan a mejorar la salud de la piel y el cabello. Su composición natural lo convierte en un ingrediente eficaz en tratamientos para fortalecer el cuero cabelludo, mejorar la circulación y favorecer la regeneración celular.

El extracto de eucalipto se obtiene de las hojas del árbol Eucalyptus globulus, rico en compuestos activos como eucaliptol (cineol), flavonoides, taninos y aceites esenciales. En cosmética, se utiliza por sus propiedades purificantes, refrescantes y antioxidantes, que ayudan a mantener la piel y el cabello saludables. Su aroma característico y sus efectos antibacterianos y estimulantes lo convierten en un ingrediente valioso en productos de higiene, cuidado facial y capilar.

El extracto de frambuesa se obtiene del fruto de Rubus idaeus, rico en vitaminas A, C y E, ácidos grasos esenciales y antioxidantes como flavonoides y polifenoles. En cosmética, se utiliza por su capacidad para proteger la piel del envejecimiento prematuro, aportar nutrición e hidratar profundamente, gracias a su alta concentración de compuestos bioactivos. Su aroma delicado y su perfil natural lo convierten en un ingrediente ideal para productos faciales, corporales y capilares.

El extracto de levadura de cerveza se obtiene de la fermentación de la levadura Saccharomyces cerevisiae y es rico en proteínas, vitaminas del grupo B, minerales como zinc y selenio, y aminoácidos esenciales. En cosmética, se utiliza por su capacidad nutritiva, regeneradora y fortalecedora de la piel y el cabello, aportando los nutrientes necesarios para mantener la salud cutánea y estimular la renovación celular. Su perfil natural y altamente nutritivo lo convierte en un ingrediente valioso en fórmulas revitalizantes y antiedad.

El extracto de malva se obtiene de las flores y hojas de Malva sylvestris, una planta rica en mucílagos, flavonoides, taninos y vitaminas A y C. En cosmética, se utiliza por sus propiedades calmantes, hidratantes y suavizantes, siendo ideal para pieles sensibles o irritadas. Su composición natural le permite proteger, nutrir y aportar confort a la piel, ayudando a mantener un cutis saludable y equilibrado.

El extracto de nim se obtiene de las hojas, semillas o corteza del árbol Azadirachta indica, conocido por sus propiedades medicinales y cosméticas. Es rico en compuestos bioactivos como azadiractina, flavonoides, aceites esenciales y ácidos grasos, que le confieren efectos antibacterianos, antifúngicos, antioxidantes y antiinflamatorios. En cosmética, se utiliza para purificar, equilibrar y proteger la piel y el cuero cabelludo, siendo un ingrediente natural muy valorado en productos de cuidado facial, corporal y capilar.

El extracto de opuntia se obtiene de los frutos o tallos del cactus Opuntia ficus-indica, rico en vitaminas (C, E y del complejo B), minerales, antioxidantes como flavonoides y polifenoles, y ácidos grasos esenciales. En cosmética, se utiliza por su capacidad hidratante, antioxidante y regeneradora, protegiendo la piel frente a agresiones externas y aportando nutrición profunda. Su origen natural y su composición rica en nutrientes lo convierten en un ingrediente eficaz para pieles secas, sensibles o estresadas.

El extracto de ruscus proviene de la planta Ruscus aculeatus, también conocida como rusco o espuela de caballero, y se obtiene principalmente de sus raíces y rizomas. Contiene compuestos activos como saponinas esteroides, que le confieren propiedades vasoconstrictoras y antiinflamatorias.

El extracto de sandía se obtiene de la pulpa y semillas de la fruta Citrullus lanatus y es rico en antioxidantes como el licopeno, vitaminas A, C y E, aminoácidos y ácidos grasos esenciales, que le confieren propiedades hidratantes, regeneradoras y protectoras frente al daño oxidativo.

El extracto de ortiga se obtiene de las hojas de la planta Urtica dioica, reconocida por sus notables propiedades purificantes, revitalizantes y fortalecedoras. Este extracto natural concentra una gran cantidad de vitaminas (A, C, K y del grupo B), minerales como hierro, sílice, zinc y magnesio, además de compuestos antioxidantes y antiinflamatorios. Gracias a su riqueza nutritiva, el extracto de ortiga se utiliza tradicionalmente para fortalecer el cabello, equilibrar el cuero cabelludo y mejorar el aspecto de la piel de forma natural.